Extracto del capítulo 5 donde Krennic rescata a la familia Erso:
Las altas puertas se abrieron y de repente Galen Erso estaba de pie al lado del carro, delimitado por dos guardias de la prisión, mirando a la mucho más delgada Lyra, cosa que ella no admitiría. Los guardias, sin embargo, no hicieron ningún esfuerzo para detenerlo cuando se arrastró hacia ella, y abrazó a ella y a Jyn durante un largo momento.
«Te ves más hermosa que nunca», dijo, dando un paso atrás para observarlas. Sus ojos fueron a Jyn. «Dejame sostenerla».
Lyra le pasó a Jyn. Con cuidado, se desprendió el pañuelo que ocultaba su rostro y sonrió como nunca la había visto Lyra sonreír. Jyn se agitó en sus brazos, y Lyra dijo: «Ella se acuerda de ti, Galen».
«Es preciosa», dijo, inspeccionando su cara. «Sus ojos han cambiado de color.»
Lyra asintió. «Están un poco moteados».
«Polvo de estrellas», dijo Galen. «Eso es lo que hay en sus ojos».
«Galen, ¿qué es lo que está pasando?» Lyra se arriesgó a preguntar. «¿Por qué nos han traído hasta aquí. No irán a-«
«No me han dicho nada. Me sacaron de mi celda antes del amanecer».
«Igual que a nosotras. Estoy preocupada».
«No lo estés». Él le mostró sus sucias manos. «¿Ves? No hay restricciones. Y nadie ha blandido un arma contra mí en toda la mañana».
Lyra no encontró mucho alivio en ello. «¿Podrían estar enviandonos a otro lugar? ¿Hay una prisión peor?»
Antes de que pudiera responder, uno de los guardias ordenó a Galen a subir al carruaje.
Él hizo lo que le indicaron, y los conductores golpearon sus látigos sobre las cabezas del leadtaqwa, que se puso en marcha a un ritmo acelerado. Las ruedas de madera del carro se movían sobre baches y roderas, y Lyra inadvertidamente se mordió la lengua. Cuando Tambolor desapareció de la vista, Galen se incorporó en el asiento para echar un vistazo alrededor.
«Nos dirigimos al puerto espacial».
Los ojos de Lyra se abrieron. «No sabes-«
«No quiero ser gafe por pensarlo».
En ese preciso instante, apareció una nave por encima y comenzó un descenso muy controlado hacia la zona de aterrizaje.
Galen escudriñó el emblema estampado en la parte más vulnerable de las luces del carguero. «¡Zerpen!»
Lyra puso el borde de su mano en la frente y siguió su mirada. «¿Desde cuándo Industrias Zerpen vuela en algo tan destartalado?»
Galen ignoró la pregunta. «Sabía que no se olvidarían de nosotros».
Lyra sacudió su cabeza, como para asegurarse de que no estaba soñando. Abrazó a Jyn más fuerte ya que el buque Zerpen se posó en su tren de aterrizaje, salpicando arena a todo el mundo. La rampa de acceso bajó y una única figura en un traje blanco adornado con el logotipo de la empresa descendieron por ella. Lyra sintió que su mandíbula se caía, y cuando se volvió a Galen vio que él también estaba boquiabierto.
«¿Orson Krennic?», susurró ella.
Él asintió, aparentemente incapaz de hablar o mirar hacia otro lado.
«Pero-«
«Tenemos que estar atentos», logró decir Galen.
Sus captores se reunieron con Krennic a mitad de camino, y tres de ellos se pusieron en fila durante un largo momento.
Krennic miró a su alrededor antes de decir. «¿Cuál de ustedes es el responsable?»
El Jefe Gruppe le respondió en Básico. «El Dergue me ha concedido autoridad para resolver este asunto.»
Krennic abrió su chaqueta y sacó un datapad, haciendo notar a Gruppe lo que estaba escrito en la pantalla. «¿Satisfecho?»Gruppe asintió y Krennic le dio el datapad al jefe. «Es para usted.»
Gruppe se metió el datapad en uno de los bolsillos de su abrigo y realizó una seña hacia donde estaban parados Galen y Lyra. «Supongo que ya se conocen».
Krennic sonrió y caminó hacia ellos. Le ofreció su mano a Galen, diciendo: «Doctor Erso, estoy tan aliviado de encontrarlo con buena salud.» Giró hacia Lyra mientras continuaba estrechando la mano de Galen. «Señora Erso y… oh, ¿ésta es la niña?»
Lyra tenía la boca abierta pero no pudo hablar.
«¿Puedo echarle un vistazo?»
Ella le acercó a Jyn y quitó el paño de su cara.
«¡Es hermosa! ¡Es igual a usted!»
Regresando a su tono de negocios, Krennic giró hacia la rampa del carguero. «Doctor Erso, si usted y su esposa son tan amables de apresurarse a subir a bordo».
«Espero que sus viajes sean fructíferos», gritó el jefe Gruppe en el momento que Galen y Lyra subían a la nave.
Una vez dentro, Krennic abrazó a Galen. «¡Qué maravilla poder verte después de tanto tiempo!»
«Orson, no entien…»
«No es el momento», interrumpió Krennic, dando un paso atrás pero sin dejar de apretar los brazos de Galen. «Te lo explicaré todo en su momento, pero ahora tenemos asuntos más importantes que atender».
Todos se dirigieron a la cabina principal, donde otros tres humanos de pelo corto estaban sentados en diversos sitios de trabajo. Todos los ojos los miraron hasta que Galen y Lyra se sentaron en los asientos de aceleración y se pusieron los cinturones de seguridad. Lyra abrazó fuertemente a Jyn.
«Haga contacto con el Comandante Prakas tan pronto despeguemos», le dijo Krennic al técnico de comunicaciones mientras se abrochaba su cinturón. «Dígale que nos de tiempo suficiente para escapar de la gravedad.»
El carguero despegó y salió despedido hacia el cielo blanco de Vallt. Galen miró con atención hacia la ventana de estribor para ver como comenzaban a surgir las estrellas.
«Prepárense para la acción evasiva,» advirtió Krennic.
Galen giró hacia la ventana principal. Un movimiento súbito en las estrellas fue seguido por un breve vistazo de una nave Separatista profusamente armada; entonces el cielo se iluminó con ráfagas de fuego láser.
«¡Ja! ¡Sabía que no cumplirían los términos del intercambio!» gritó Krennic.
Lyra abrazó aún mas fuerte a Jyn al tiempo que el carguero recibía los disparos. Un destello de luz brillante iluminó los ventanales y el carguero giró hacia babor, su parte interior cubierta de escombros.
«Teniente Comandante, estamos en posición».
Krennic se postró sobre la consola. «¡Justo a tiempo, Prakas! Tenemos droides y una nave clase Settie en la superficie, aunque ya debe de estar en la atmósfera. Cuando termines con ellos, continúa con la ciudad».
«¡Orson, no!» dijo Lyra con voz angustiada. «Esta hecho. ¡Ya todo terminó!»
«Todavía no» dijo Krennic sin mirarla. Sus ojos estaban fijos en Galen. «Nuestro ataque le dará una oportunidad de reclamar el poder a las legiones pro-Repúbica. Más aún, hemos prometido a Zerpen que recuperarán su laboratorio de ignición».
«Son inofensivos, Orson.» dijo Galen, «sean o no Separatistas».
Krennic lo miró con condescendencia. «Tal vez. Pero estamos en guerra, y ellos están en el bando equivocado».
Si algo podemos sacar en claro de este extracto, es que Galen Erso y Orson Krennic tienen una amistad de antes, con lo que acontecerá después deberá ser muy interesante viendo la moral y los intereses de cada uno.
Desde luego esta novela pinta bastante trascendete ya que verdaderamente hará que conozcamos mucho mejor a estos personajes que aparecerán en la película, y de donde vienen.
«Catalyst: A Rogue One Novel» escrita por James Luceno (Tarkin), se publicará el de 15 Noviembre en Estados Unidos. En España hay indicios de que pueda publicarse a finales de Noviembre, pero por el momento no hay confirmación oficial por parte de Planeta Cómic.
Fuente: USA Today
Desde este Blog se han detectado transmisiones de Real Fans de Star Wars. Recuerda ser respetuoso y no escribir spoilers. Que la Fuerza te Acompañe.